¿Por qué los problemas económicos suelen generar malas decisiones?
¿Por qué los problemas económicos suelen generar malas decisiones? Parece mentira, pero estudios recientes han señalado que la carga psicológica; derivada directamente de vivir en un contexto de escasez, logra afectar de cierta forma al cerebro humano. En este caso produce un deterioro cognitivo, que se traduce en peores decisiones vitales. Y de consecuencia genera una perpetuación en el estado de pobreza.
En este punto; cabe mencionar que dicho estudio, confirmó que uno de los obstáculos principales que le impide a las personas pobres; para poder superar la pobreza. Es sin duda alguna la tendencia de adoptar costosas decisiones financieras, como es el caso de comprar, por ejemplo: boletos de lotería, o en su defecto tomar préstamos a elevados tipos de interés, como al inscribirse en programas asistenciales que les hacen creer que su situación mejorará. Y lo único que consiguen es terminar de empeorar su situación financiera.
Que debemos saber sobre los problemas económicos
Como es de saber, desde siempre estas malas decisiones se han atribuido más que todo a la personalidad de los ciudadanos de bajos recursos como así mismo al ambiente en el que viven, como al poco acceso a la educación y así mismo a condiciones de vida por debajo de los estándares, sin embargo la investigación publicada en Science hace poco por el profesor de Ciencias del Comportamiento Anuj Shah, nos ofrece una nueva respuesta a ello, este estudio señala que vivir con escasez logra cambiar de forma drástica la psicología de las personas, ya que cuando los recursos son escasos y por ende las personas tienen poco dinero o comida cada decisión sobre la mejor manera de utilizar esos recursos se toma con mayor urgencia que en los casos cuando se dispone de tales recursos en abundancia.
Conclusiones
Si bien es cierto que este enfoque puede tener efectos positivos a corto plazo, hay que tener en cuenta que cuando se realizan a costa de descuidar otras demandas más urgentes, los afecta a mediano y a largo plazo, es decir, que cuando las personas están bajo la presión de gastos urgentes como es el caso de pagar el alquiler o incluso de comprar comida, las personas terminan descuidando otras cosas importantes como lo puede ser el mantenimiento de rutina de sus vehículos y por ende, terminar luego pagando costosas y evitables reparaciones, y así pasa con muchas otras cosas importantes.